Este es el primer posteo de una nueva sección que no nos
agrada mucho pero puede llegar a aportar bastante para sacarnos las caretas.
Sabido es que el periodista Leo Farinella, confeso hincha de
riBer que también se fue a la B por puto y cagón es el director del diario
deportivo Olé que hoy en día ya pasa a ser una gacetilla partidaria.
En el ámbito del periodismo deportivo se puede ser hincha de
cualquier equipo pero siempre se trata de mantener la imparcialidad de los
colores como meta principal para no caer en las pasiones y el fanatismo, rol en
que entraríamos los hinchas.
Pues bien, en el diario Olé no pasa eso. Los colores le
tiran más al director y no hace más que llevar agua para el molino riBerpatense
utilizando cualquier tipo de artimañas.
La política que se utiliza es simple; para favorecer a riBer
se habla bien de este, se lo eleva mucho mas de la cuenta y siempre le aportan
un granito de arena extra (que a esta altura ya descargaron un camión volcador).
En la otra vereda, la nuestra, la de Boca Juniors, siempre
se lo critica; se pone un manto de sospechas en los arbitrajes, quieren constantemente
echar al técnico de turno y se inventan peleas dentro del vestuario para hacer
un remolino y tener una ventaja extra.
Esta política es siempre con cautela, haciendo observaciones
donde pueden favorecer o perjudicar depende la camiseta que se analice y más en
el caso de Boca que siempre le pegan una patadita por debajo de la mesa.
Esto es de público conocimiento, de hecho hay una campaña
para que los hinchas de Boca no compremos el Olé. Algo que tratamos de hacer
siempre, pero a veces es más fuerte que uno y sumado a los éxitos deportivos
del club caemos en la tentación y sacamos los $ 9.- que vale la el diario
partidario y lo compramos.
Más en nuestro caso que coleccionamos todo tipo de información de Boca y al archivar gloria pecamos
muchas veces y terminamos negociando con nuestro canillita amigo ¿?.
También es por una cuestión de saber que se dice en la
vereda de en frente, como ocultan información o tratan de hacerla sentir más
leve si es en pro de Boca.
Este posteo que se va a transformar en sección, empezó el día
domingo cuando compramos el Olé para ver la cobertura de la gente de Farinella después
del clásico de verano y ahí seguimos encontrando plumas en el diario con
detalles que tratan de opacar el triunfo Xeneize.
Esta es la tapa del diario del domingo, post partido donde
la noticia era el triunfo de Boca con juveniles y suplentes frente a un riBer
que viene de ganar 2 títulos el año pasado y como dato negro la lesión de
Vangioni a Pavón.
Hasta ahí bien, hasta que aparece en el pie de foto el típico
comentario anti Boca tratando de quitarle méritos al triunfo.
En un partido amistoso (o que no hay título oficial en
juego) donde la noticia es que Boca vuelve a ganar el clásico después de los
que hubo en 2014, ¿es necesario marcar que el gol fue en offside? Más teniendo
en cuenta que en un par de repeticiones, Niembro y cia no llegaban a comprobar
si había fuera de juego o no en la jugada del gol con cámaras de diferentes ángulos
y congelando la imagen televisiva.
Eso no hace otra cosa que poner en tela de juicio el notable
triunfo de Boca en el clásico.
Pero no termina ahí la cosa, y como ya hemos dicho de los
privilegios hacia riBer que tiene el diario, en el medallero del fin de semana, el
premio "Terminator" (rótulo que se le otorga al protagonista de la jugada más
brusca del fin de semana) se lo lleva
Cristiano Ronaldo por la expulsión en el partido del Real Madrid.
Claro, ustedes estarán pensando que ese premio sí se lo
llevó Vangioni en el medallero del partido. Pues no. Ese privilegio lo tiene
Gigliotti en la jugada donde va fuerte contra Barovero, quien siguió jugando lo
mas bien y fue solo una jugada brusca. A Vangioni le dieron el premio "Chenemigo"
a modo del mal parido que tuvo, ignorando la mala intención repetida del
volante de la banda roja.
En fin, esa es la verdad de Olé. De a poco vamos a ir
mostrando este tipo de artimañas para tirar a favor de riBer y equilibrar una
balanza (imposible de equilibrar) perjudicando y quitándose méritos a Boca.
Por eso ya sabe socio, hincha o simpatizante de Boca y del
periodismo objetivo: NO COMPRE EL DIARIO OLÉ.
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